JORNADA 13. LOS RÍOS VS DEVA
Los Ríos no puede con el oficio del Deva pese a la mejoría en su juego
Dos jugadas puntuales en los primeros compases de cada parte condenan a los verdinegros y les sacan de los puestos de ascenso.
Sabían ambos equipos que era un partido importante. Los Ríos quería alejar en la clasificación a un rival directo por el ascenso y el Atlético Deva necesitaba los tres puntos para acercarse a los puestos nobles de la tabla. Pero fueron los locales los que salieron más fuerte al campo, con una limpia salida de balón, combinaciones en corto y en largo y una buena presión arriba. Así, en los primeros minutos las ocasiones fueron de Los Ríos y principalmente a través de su capitán Bertín, quien fue protagonista de dos jugadas individuales que, pese a no culminar en gol, sí advirtieron del gran estado de forma del nueve verdinegro. El conjunto visitante, por su parte, ofreció ya desde el inicio sus grandes señas de identidad: defensa férrea ordenada y balones largos a su gran estrella, Luis Peñil. Fue precisamente éste, quien si no, el protagonista del primer y decisivo gol del encuentro. Corría el minuto 15 cuando el capitán del Deva le roba la cartera al zaguero local Jose en las inmediaciones de su área pequeña y cede el balón a un compañero para que ejecute a placer. Como ya ocurriría una semana antes en Comillas, un fallo en la salida de balón condenaba en los primeros minutos al conjunto de Pedro Azcona.
El gol encajado fue un mazazo para los locales que, en estado de shock, fueron un juguete en manos del Deva los siguiente diez minutos. Se perdió la confianza y con ello la precisión, lo que fue aprovechado por los de Unquera para encajonar a su rival en el área y disponer de varias ocasiones que no fueron materializadas, unas veces por errores propios, otras por aciertos de Vía. Hubo que esperar al minuto 30 o así para que Los Ríos se repusieran y volvieran a tener el dominio del partido. Así, primero Aja enviaba al travesaño un buen servicio de Gelo, muy activo durante todo el partido, tras robar el balón en el campo visitante. Y después, Oria de libre directo magistralmente ejecutado estaba a punto de poner las tablas en el marcador pero se topaba con el guardameta rival cuando el balón llevaba marchamo de gol. Desde el minuto 30 hasta el pitido final de la primera mitad, Los Ríos fue dueño y señor del partido, pero no logró materializar sus ocasiones ante un rival muy bien plantado atrás.
Se llegaba pues, una vez más, por detrás en el marcador al descanso. Pero esta vez, a diferencia de otras, no era tanto por mal juego como por mala fortuna. Tras los quince minutos de descanso, la segunda parte se iniciaba como acabó la primera: en campo del Deva. Ya en el primer minuto una gran jugada de Gelo por banda derecha no encontraba rematador para el pase de la muerte. Y poco después, un buen pase a la espalda de la defensa para Bertín lo coloca ante el portero pero su vaselina pasa por encima del larguero ante la desesperación del público local. Parecía escrito: quien perdona, lo paga. Y así fue: minuto 15 del segundo tiempo, balón dividido a unos 25-30 metros de la portería de Vía, aparece de la nada Peñil y... ¡boom! Trallazo por toda la escuadra. Así, como que no quiere la cosa, 0-2. Si en otros partidos, como por ejemplo ante el Cueto, la diosa Fortuna se aliaba con Los Ríos, esta vez la misma diosa se la jugaba al que hasta entonces era líder de la categoría.
Quedaban 30 minutos y aún era posible el milagro. De hecho, Azcona pusó toda la carne en el asador con cambios ofensivos y un sistema 3-3-4 en el campo. Los jugadores respondieron, no sólo con corazón sino también con cabeza, y las ocasiones se sucedieron: disparo de Gelo en la frontal del área, pase de la muerte de Álvaro que no encuentra rematador, chut a bocajarro de Víctor... pero no era el día, no había forma, y todos los ocasiones se encontraban con el otro gran protagonista del partido, también Peñil de apellido pero de nombre Marcos. ¡Vaya paradas! Entre las gloriosas intervenciones del meta visitante y las constantes interrupciones de los jugadores de Unquera, transcurrían los minutos y el marcador no se movía. Con Los Ríos volcado, tuvo alguna ocasión también el Deva para sentenciar pero el 0-2 parecía definitivo y así fue. Tras obviar deliberadamente el árbitro una agresión en forma de cabezazo del lateral izquierdo visitante, y pese a la tensión acumulada, señalaba tranquilamente el colegiado, como quien pasaba por allí, el final del partido ante la alegría de un equipo, el de Unquera, que supo aprovechar sus armas mejor que los santanderinos para llevarse los tres puntos y acercarse a los puestos de ascenso. Unos puestos que ya no ocupa, por primera vez en la temporada, Los Ríos.
El viernes, ocasión para recuperarlos en el complicado campo de la revelación de la temporada, el Liendo.