JORNADA 27. LOS RÍOS vs EMD REOCÍN

03.04.2014 14:18

Un punto pese a la adversidad

 

A pesar de llegar a ponerse 2-0 en el marcador, Los Ríos acabó cediendo un empate en su feudo frente a un Reocín netamente superior desde el punto de vista físico.

 

Llega el sprint final a la Primera Regional cántabra, y aún quedan muchas incógnitas por resolver. Cuatro equipos se disputan tres puestos de ascenso, y el pasado domingo en las instalaciones de El Regimiento se enfrentaban, ni más ni menos, que el actual líder y el segundo clasificado, un encuentro en el que estaba en juego encabezar la tabla y que ponía en liza dos estilos completamente antagónicos: el fútbol de toque de Los Ríos y la potencia y verticalidad del EMD Reocín.

Comenzaron los de Azcona bien plantados sobre el césped artificial del Uco Alciturri, embotellando a los visitantes y creando varias ocasiones de peligro, principalmente a través de saques de esquina bien botados por Álvaro. Sin embargo, poco a poco el líder de la categoría logró sacudirse ese dominio, y a base de balones largos y diagonales comenzó a inquietar a la zaga local a través de sus rápidos puntas. Fueron 20 minutos iniciales de intercambio de golpes, en los que uno y otro equipo, con sus armas, merodeaban las áreas rivales sin excesivo peligro.

Poco a poco, el medio campo de los visitantes se iba imponiendo al de los verdinegros, no en vano los de Azcona contaban con cuatro bajas en esa línea y, de los tres centrocampistas de inicio, ninguno jugaba en su posición. De hecho, las lesiones se están convirtiendo en un auténtico quebradero de cabeza para Los Ríos, que, con hasta 8 ausencias para esta jornada, contaba solo con tres cambios, incluyendo al meta suplente. Sin embargo, cuando parecía que el Reocín se iba haciendo con el control del encuentro, llegó el tanto de Álvaro, quien desde el lateral del área enganchaba un potente disparo que sorprendía al portero visitante. Era su primer gol de la temporada, y no podía llegar en un partido ni en un momento mejor.

El tanto cambio por completo el escenario y ahora era Los Ríos el equipo que circulaba el balón a las bandas, en donde Gus, Álvaro y un algo más discreto Aja desafiaban una y otra vez a sus defensores. Fruto de ese dominio fueron llegando las oportunidades para los de la capital, aunque los visitantes, corpulentos y siempre peligrosos con sus diagonales, tampoco permitían excesiva relajación. De hecho, un mal despeje que Vía recogió con las manos, y que solo el colegiado entendió como cesión, se convertiría en la ocasión más clara de la primera parte para el Reocín, aunque el propio meta y su zaga evitaron la igualada.

En el segundo tiempo, el guión, al menos en los primeros minutos, fue idéntico al inicial, y todo apuntaba hacia una posible victoria de Los Ríos. Más aún cuando, apenas cinco minutos después de salir de los vestuarios, Jairo aprovechaba una magnífica asistencia de Bertín para definir con maestría y poner el 2 a 0 en el marcador.

Sin embargo, a partir de ese momento, el partido dio un vuelco. Los cambios ofensivos efectuados por el técnico visitante sirvieron para que su conjunto diese un paso hacia delante y se hiciese con el control absoluto del medio campo. Por su parte, los de casa, muy justos de fuerzas por el enorme esfuerzo realizado en los primeros 60 minutos de partido, hacían lo que podían para contener los ataques del rival, aunque sin éxito. El encuentro se convirtió en un monólogo del Reocín, que generaba una oportunidad tras otra, mientras que los de Azcona no pasaban de su propio campo, no creaban ningún peligro a la contra y ni siquiera acertaban a achicar balones. El equipo necesitaba reforzar la zona media para poder presionar algo más arriba los desplazamientos de los centrales contrarios y para hacerse con alguna segunda jugada, pero no quedaban ni gasolina ni alternativas, puesto que, de los tres jugadores que había disponibles en el banquillo, ninguno podía aportar en el centro del campo.

Con semejante dinámica, la duda radicaba en saber cuánto tardaría el Reocín en marcar y en si tendría margen para lograr al menos la igualada. Restaba media hora de partido, poco tiempo para los visitantes y una eternidad para Los Ríos, pero entonces Vía hizo aparición para convertirse en la figura absoluta del encuentro. Hasta 9 acercamientos peligrosos y alguna jugada polémica en el área sumaron los de fuera en ese último tercio, pero el meta local, muy seguro en los balones colgados, realizó varias intervenciones de mérito que privaron al Reocín de conseguir la victoria, aunque no el empate. Y es que, en un par de despistes de la zaga local los visitantes igualaban con dos tantos casi consecutivos.

A la conclusión del encuentro, sensaciones enfrentadas. Las caras de los de Azcona dejaban claro que el equipo no está acostumbrado a ser superado y a sufrir como lo hizo durante la última media hora de encuentro, y menos aún a no generar ni una ocasión de peligro en todo ese tiempo. En cualquier caso, el punto, viendo lo acontecido, puede considerarse como positivo, y más si se tiene en cuenta que la enfermería del club está desbordada ante la plaga de bajas que sufre el equipo. Superada la jornada, Los Ríos mantiene su segunda plaza, sigue a dos puntos del Reocín y todo apunta a que en los próximos días irá recuperando efectivos. Esperemos que, al menos, se pueda completar la convocatoria de cara al partido en Limpias, un campo complicado en el que debe notarse qué equipo se juega más.