JORNADA 19. VIMENOR B VS LOS RÍOS
Los Ríos vence con justicia pero sin brillo.
El conjunto santanderino necesitaba los tres puntos, y los consiguió, pero la imagen dada, sin llegar a ser mala, tampoco fue buena.
Era un partido más importante de lo que parecía. Un partido de los que se califican como “trampa”. El Vimenor B recibía a Los Ríos en teórica situación de inferioridad, en puestos de descenso y recién apabullado en Vargas. Pero el conjunto verdinegro se plantaba en Vioño tras caer derrotado en casa ante un rival con similar bagaje, con dudas en su juego y, sobre todo, muchas bajas, que hacían presagiar un partido complicado.
Y así fue desde el principio. Como había pocas bajas, el partido comenzó con una más. Corría apenas el segundo minuto de juego cuando en un balón dividido un jugador del Vimenor B entraba a Rozas con la plancha por delante, privándole a éste de disputar el resto del partido. El árbitro, a metro y medio del lugar de la acción, no señalaba pese a todo ni siquiera falta. Aún jugando con uno menos durante unos minutos, esperando una milagrosa recuperación del bravo jugador santanderino, Los Ríos dispuso en estos primeros compases de varias ocasiones de meridiana claridad, y principalmente un mano a mano de Bertín que un defensa salvaba casi en la línea tras superar al portero. También Aja, tras ingresar en el terreno de juego, dispuso de un par de oportunidades claras, una en un córner y otra tras una gran cabalgada de Víctor. Pero el marcador no se movió en los primeros minutos.
Pasado el vendaval inicial verdinegro, el Vimenor se sacudió el dominio y comenzó a llegar al área defendida por Kevin, aunque sin materializar las llegadas. Había aproximaciones con cierta periodicidad, pero no eran precisamente ocasiones claras. Por parte de Los Ríos, el trío formado por Oria, Zabala y Gelo aportaba trabajo pero no precisión en la elaboración del juego, lo que se traducía en un juego poco fluido. Así las cosas, el partido estaba bastante aburrido cuando el minuto 35, un balón luchado por Jairo y Bertín era aprovechado por éste para, tras una buena conducción, plantarse ante el guardameta rival y batirle con una definición propia de un “killer”. Era el 0-1 y el partido se ponía de cara. Quedaban diez minutos en los que apenas pasó nada.
Llegó el descanso y las cosas no estaban del todo claras. Se llegaba con ventaja en el marcador, pero no había percepción de superioridad. Las bajas de David y Rozas se notaban en el medio del campo, por la combinación de calidad y tesón que éstos aportan, pero no había jugadores de su perfil disponibles para este partido. Así las cosas, se apostó por un medio del campo creativo formado por Oria, Aja y Gelo, con la clara intención de defender con el balón.
Y así fue durante los primeros compases de la segunda mitad. Los Ríos tenía el balón ante un rival replegado, si bien carecía de la profundidad necesaria para inquietar el marco rival. Muy ordenados, no había problemas en defensa, pero tampoco ocasiones en ataque. Del mismo modo, el Vimenor parecía conformarse momentáneamente con el 0-1, a la espera de neutralizar el marcador en los minutos finales. Pudo sentenciar Bertín en alguna ocasión puntual, pero no fue así y poco a poco, Los Ríos se fue diluyendo como un azucarillo, mientras el Vimenor, por su parte, iba creciendo con el paso de los minutos.
Aún quedaban unos 20 de juego cuando el Vimenor se hizo dueño y señor del partido ante un rival mermado físicamente que quería defenderse con el balón, pero no lo lograba por la falta de frescura. El conjunto local tenía, ahora sí, el balón, pero no creaba tampoco ocasiones. Zabala y José se mostraban infranqueables y repelían cualquier ataque rival. A balón parado, Kevin se hacía con el balón en todas las salidas, por lo que tampoco pasaban apuros los visitantes en este sentido. Y así pasaron los minutos, sin especiales sobresaltos aún con tensión en el ambiente por la importancia del partido. Finalmente, tras los pertinentes minutos de añadido, el árbitro señaló el final del encuentro y los tres valiosos puntos subían definitivamente al casillero de Los Ríos.
Tres puntos, como se decía al principio, muy importantes, pues permiten a los verdinegros mantenerse en la zona noble de la clasificación, si bien dejan un sabor agridulce, pues las dudas sobre el juego no quedaron disipadas del todo. Habrá que esperar una semana más para ello.