JORNADA 12: COMILLAS - LOS RÍOS
Los Ríos deja escapar dos puntos en el último suspiro
Un gol en el minuto 89 privó al conjunto santanderino de una victoria que, quizás, hubiera sido injusta visto lo visto, pero que le hubiera servido para distanciarse de sus perseguidores.
Era el duodécimo partido de la temporada pero el primero en césped de hierba natural, por lo que el partido se antojaba complicado, pese a la difícil situación clasificatoria del rival, apenas un par de puestos por encima del descenso. Y el partido fue complicado desde los primeros minutos, con un Comillas que demostró que es un equipo con más nivel del que refleja la clasificación. No en vano, apenas transcurrían tres minutos de partido cuando Kevin sacaba en corto para Zabala y éste cedía el balón a Rozas, quien tras un mal control, perdía el balón ante dos rivales que rápidamente encaraban la portería rival, con un pase a la banda izquierda y un ulterior pase de la muerte que un atacante local transformaba a placer en el primero de la mañana. Mazazo para los visitantes quienes, sin embargo, se recompusieron y pronto disponían de sus primeras ocasiones con un participativo Aja en la banda izquierda. Pero hubo que esperar al minuto 15 para que llegara la igualada a través de una pena máxima ejecutada por Bertín tras ser objeto de un claro derribo en el área. Con empate en el marcador, las fuerzas se igualaron y el encuentro se mantuvo durante el resto de su primera mitad con constantes aproximaciones de ambos equipos, sin ser no obstante ocasiones claras en su mayor parte. Cabría destacar, si acaso, alguna jugada individual de Aja por su carril del 11, o en el caso del Comillas, más de un acercamiento con peligro por ambas bandas con jugadores de notable calidad técnica. El cuadro local, en todo caso, se sintió más adaptado al terreno de juego embarrado y resbaladizo que el cuadro visitante, y de ahí que los jugadores visitantes se fueran a los vestuarios con la sensación de que algo no iba del todo bien, como ya empieza a ser, al fin y al cabo, una tradición en este mes de noviembre.
La segunda mitad comenzó como la primera, con un Comillas bien plantado en el terreno de juego, con las ideas claras, y un Los Ríos con sus virtudes oscurecidas por el escenario. Así las cosas, en el minuto 15 tuvo lugar un cambio en el sistema de juego, pasando del 4-4-2 de inicio al 4-3-3, con Ciro por delante de la defensa y David y Rozas con mayor libertad en el medio del campo. El cambio de sistema sentó bien a los verdinegros, que fueron haciéndose con el partido. Los visitantes, a su vez, fueron perdiendo el balón... y los nervios, y como consecuencia, primero el entrenador y después el delantero eran expulsados por protestar. Con un hombre más en el campo, Los Ríos disfrutaría de una primera ocasión clarísima por medio de David, que tras un buen pase de Rozas, estrellaba el balón en el travesaño. Y pocos minutos después, en el 30 de la segunda mitad, una falta ejecutada por Iván era mal blocada por el guardameta local y en el rechace, un atento Rozas lograba el 1-2 en el marcador. Tras el gol, y pese a contar con un hombre menos, el Comillas dio un paso hacia adelante y se hizo con el partido, disponiendo de varias ocasiones que unas veces la defensa y otras un colosal Kevin se encargaban de resolver. Y así llegó el fatídico minuto 89: balón que pierde David en el medio del campo -y que no puede corregir con falta al tener ya tarjeta amarilla- ante un rival que mete la directa, ve al delantero local desmarcarse, José emborrona su partido con un involuntario resbalón, y sólo ante el portero, gol, empate y el júbilo en los jugadores locales. Este júbilo bien pudo, sin embargo, convertirse en tristeza si Los Ríos hubiera aprovechado alguna de las dos ocasiones de las que dispuso en el arrebato final: una primera, protagonizada por un Gelo que en un rechace a placer optó por una acrobática –e inverosímil- tijera que se perdió por encima de la portería; y una segunda, protagonizada de nuevo por Gelo tras un robo de balón y posterior asistencia a Rozas que, a su vez, deja pasar el balón para un Bouzo que controla mal y no logra culminar la jugada que hubiera supuesto una importantísima victoria en un difícil campo. Pero no pudo ser, y los dos puntos volaron del casillero de Los Ríos, pese a lo cual se mantiene líder, una jornada más, a la espera de la visita, el próximo domingo, de uno de los gallos de la categoría, el Club Atlético Deva.